Así que por fin conociste al hombre o mujer de tus sueños: tienen conversaciones geniales, la pasan muy bien…
Todo excelente! Pero de pronto su esposo o esposa te llama acusándote de intentar destruir su matrimonio, y tus sueños se terminan súbitamente. Desafortunadamente, por una u otra razón los hombres y las mujeres algunas veces cometen errores, y si no tienes cuidado, te puedes ver en medio de una situación terrible que no imaginabas. ¿Cómo saber si esa persona es casada?
No te involucres con una persona que sepas que es casad@. Esto debe ser obvio, pero hay muchas formas en que una persona casad@ pueda explicar su situación. Por ejemplo, un hombre puede decirte que está separado de su esposa, o una mujer puede decirte que está a punto de consumar su divorcio. El “a punto” no cuenta. Acercar a estas personas a tu vida amorosa es como invitar a que te rompan el corazón y posiblemente salgas herido físicamente.
Confía en tus instintos. Si tienes la sensación de que algo está mal, no la ignores. Donde hay humo generalmente hay fuego.
Observa las señales obvias. El anillo de casados debería despejar todas tus dudas de inmediato. Pero asumiendo que esa persona es lo suficientemente inteligente para quitarse el anillo del dedo, aún es posible ver la línea del anillo en el dedo anular. ¿Tiene fotos de una mujer en su cartera o en su escritorio? Estas pistas obvias deben darte certeza, y deberías preguntarle y quizás comenzar a investigar.
Considera si las citas con esa persona son extrañas de alguna manera. Si tu cita no te da su número de teléfono e insiste en llamarte, debe ser un foco rojo. Lo mismo ocurre si solo te da su número de celular o del trabajo. Otra mala señal es si las citas siempre son pre arregladas y tienen márgenes de tiempo estrictos. De igual manera si las citas siempre son en algún lugar alejado (otra ciudad o vecindario, por ejemplo), o la otra persona siempre quiere estar en el interior. Otras señales que deben preocuparte son si alguna vez has visto su casa, o si siempre elige visitarte, o si ni siquiera sabes dónde vive. En una relación normal no deberías tener estas dudas. Si es así, entonces hay algo mal.
Observa comportamientos raros durante la cita. Si durante la cita suena el celular de la otra persona, y se tiene que levantar para contestar, tómalo en consideración. Puede que haya sido una llamada del trabajo, pero también puede ser su esposo o esposa. La segunda posibilidad se vuelve cada vez más plausible si continúan las llamadas. También deberías considerar extraño si tu cita ve a una persona y la intenta evitar.
Observa sus reacciones cuando hables de familia y relaciones pasadas. Generalmente estas pláticas salen durante la conversación, pero si sospechas, puedes traerlas a la conversación a propósito. Si tu cita se ve incómoda de hablar de esos temas, o si su lenguaje corporal indica que puede estar mintiendo, entonces debes tener cuidado.
Si tu cita te da extrañas o sospechosas razones para no querer ir a ciertos lugares. Considera esto como un foco rojo, porque quizás quiere evitar estos sitios para evitar ser visto por alguien que le pueda decir a su esposo o esposa lo que está pasando.
Asegúrate de conocer a los amigos de tu cita. Es normal que en algún momento de la relación tengas la oportunidad de conocer a algunos de los amigos de tu cita. Si no ocurre esto, quizás es porque te está escondiendo de ellos.
Asegúrate que te convenzan sus respuestas. Si le preguntas si algo malo le está pasando, debes asegurarte de saber si dice la verdad. Si tienes alguna duda, puede ser tiempo de terminar la relación, o de hacer alguna investigación. Decir una mentira no es un gran problema para alguien que engaña a su pareja, así que no dejes que te ciegue el amor aceptando cualquier respuesta que te dé.
Ve a su casa de manera inesperada. Esto asumiendo que conoces donde vive. Generalmente una visita rápida a la casa te dirá si la persona es casada.
Haz un poco de trabajo de detective. Una simple búsqueda del nombre de la persona en internet te puede dar información interesante, como fotos de él o ella con su esposo/a en una fiesta o cosas similares. Si quieres ir más allá, puedes investigar en los registros públicos, por ejemplo, para ver quién es el propietario de su casa. Su auto también te puede dar alguna pista. ¿Su registro aparece con el nombre de dos personas?
Contrata un profesional. Las relaciones se basan en la confianza, y es difícil seguir siendo digno de confianza cuando contrataste a un investigador privado, pero si realmente necesitas respuestas, entonces puedes intentar esto.
0 Comentarios